Cambio climático, olas de calor, ciudad y sin aire acondicionado. La conjunción perfecta para pasar un verano infernal. Pero no sufras, te damos las claves para sobrevivir a las altas temperaturas con bajo presupuesto.
Aísla tu hogar
¿Cómo? Muy fácil, baja el toldo y las persianas y cierra las ventanas en las horas centrales de máximo calor. Sí, aunque estés a oscuras. Mucha gente piensa que mantener abiertas las ventanas todo el día es sinónimo de frescor. Error 404. En vez de refrescar la casa lo que conseguirán será calentarla más. Así que, ya sabes, más o menos de 11 a 20:00 horas mantén tu casa aislada y a oscuras. De esta forma la proteges del bochorno y los rayos del sol.
Abre las ventanas
Esta es la segunda parte de la operación anterior. Ahora toca refrescar la casa, así que sube persianas, abre ventanas y recoge el toldo para dejar entrar la brisa y el frescor. ¿Cuándo? Pues desde las 21:00 hasta las 10:00: la noche y el alba calmarán y refrescarán tu casa preparándola para una nueva jornada.
Crea corrientes cruzadas
Mantén abiertas las ventanas opuestas para que el aire fluya y cree corrientes cruzadas.
Huye de la humedad
Intenta no tender la ropa dentro de casa ni hervir ni cocer alimentos en las horas puntas de máxima temperatura. Y si puedes evitar planchar con vapor pues genial. La humedad provoca una sensación térmica de calor sofocante.
Viste tu casa de colores claros
Elige blancos, beis, vainillas y tejidos suaves para cubrir tus sofás –sobre todo si son de piel–, las camas, etc. No harán que baje la temperatura, pero sí conseguirán engañar a tu mente provocando una sensación de frescor.
Instala ventiladores de techo
Son mucho más decorativos que los de pie, ocupan menos y distribuyen el aire de forma equitativa haciendo que el ciclo fluya de arriba abajo y viceversa. Como sabes, el aire caliente se concentra en las capas alta mientras que el aire fresco, más denso, se queda abajo; el movimiento de las aspas del ventilador hace que el aire frío fluya.
Abajo mejor que arriba
Especialmente indicado para aquellos que tengan una casa con dos o varias alturas. Los sótanos y plantas bajas mantienen mejor el frescor que el resto, así que, si éste es tu caso, hazte fuerte en las primeras.
Elige bebidas calientes
Lo hacen en la India, en Marruecos y en África con más de 40 grados a la sombra, y por algo será. Nuestro cuerpo mantiene una temperatura de entre 36 y 37 grados y, cuando tomamos bebidas frías es cierto que refresca momentáneamente pero le estamos enviado un mensaje claro a nuestro organismo: “por favor, equilibra mi temperatura y genera más calor”. Sin embargo, las bebidas calientes causan el efecto contrario. ¿Un consejo? Prueba con té de menta o poleo.