En España somos más de comprar que de alquilar, es así. Quizás sea porque realmente no existe una política que apoye y potencie el mercado del alquiler o puede que simplemente esté en nuestro ADN. La cosa es que, si lo piensas bien, a veces sale igual de precio alquilar que comprar, y más ahora que ambas opciones están en alza simultáneamente y como un hecho excepcional.

Como todos sabemos, la hipoteca de una casa es el mayor gasto al mes del español medio; si tenemos en cuenta los últimos datos sobre el salario en España, veremos que vamos muy pero que muy justos. El importe del crédito inmobiliario creció durante el primer trimestre del año 2018 hasta los 121.123 €, un 5,1% interanual más. Nos hipotecamos durante 20, 25 y hasta 30 y 35 años, así que elegir bien y tener las cosas claras es clave en este proceso.

Visualiza tu objetivo

Si ya tienes claro que vas a comprar, ahora tienes que decidir si lo adquieres para vivir, como inversión para venderlo posteriormente o para alquilarlo. Es muy importante tener claro el objetivo para poder enfocarte y hacer una compra satisfactoria. Si tu idea es alquilarlo, comprueba la rentabilidad media de los alquileres en la zona o barrio que te interesa.

Sé fiel a tu idea

Si lo quieres de segunda mano o vivienda nueva; cuántas habitaciones necesitas; certificado energético… Si vas a vivir en él, piensa bien a qué podrías renunciar y qué es una condición sine qua non. Por ejemplo, podrías renunciar a la plaza de garaje pero para ti es vital que tenga terraza, o te sobra una habitación y te falta un trastero… Que el piso se adapte a ti y no tú al piso, en la medida de lo posible, claro.

Decide el presupuesto

Te aconsejamos que seas implacable contigo mismo y no te muevas de esa primera idea, si no terminarás subiendo y subiendo tu límite. Y al final, acabaras mental y emocionalmente agotado y tendrás que regresar al primer presupuesto desde la desilusión. Evita ese proceso con una buena dosis de ideas claras y pies en la tierra. Lo más práctico y sano es que el importe que destines a la compra de tu vivienda sea más o menos el 35% de tus ingresos mensuales.

Define la forma de pago

Si es al contado se suele hacer extendiendo un cheque bancario; si pides un préstamo hipotecario habla con tu banco para ver plazos de devolución y condiciones; si optas por la subrogación hipotecaria (es cuando asumes la deuda hipotecaria del vendedor) asegúrate de que todo está en orden con el vendedor.

Habla con tu banco

Infórmate bien de las condiciones del préstamo hipotecario y también de tus derechos como comprador. Por ejemplo, debes saber que no tienes por qué realizar una subrogación de hipoteca; puedes pedir una nueva.

Y si te sientes un tanto abrumando por tanto papeleo y quieres ir al grano sin perder tu tiempo, lo mejor es que acudas a una de nuestras oficinas para que un profesional te ayude con la búsqueda, las visitas, los trámites y la compra definitiva de tu nuevo hogar. En Encuentro sabemos ayudarte.